Por asuntos laborales no había tenido tiempo ni de asomar la nariz en las rebajas del mes de enero. Pero este sábado se me ocurrió echar una ojeada por Zara y Bershka del Tolón. Nada más alejado de lo que realmente son las rebajas en el país de origen de estas firmas comerciales. En el caso de Venezuela, una prenda que costaba 89.000 bolívares ahora cuesta 69.000 bolívares, una que costaba 159.000 ahora cuesta 129.000 y así sucesivamente. Si eso es rebaja ustedes me dirán.
Pero bueno, dejando a un lado el cálculo económico sobre los precios de estas prendas de vestir, que se deben estar comprando a un dólar no precisamente rojo rojito (de Cadivi o cambio oficial), tengo que decir que no encontré la talla L en estas tiendas.
¿Alguien me puede explicar por qué co… en el país de las mises se acaban tan rápido las tallas L o grandes, o es que no existen? Ya sé que a las gorditas y a los gorditos nos sacan prácticamente del mercado de la moda, pero pensé que por lo menos podría encontrar una que otra blusa acorde con mis medidas.
En fin que esto es un trauma. Ya se ha escrito mucho de la discriminación por las tallas. ¿Que más podemos decir entonces? Bueno que hay algo positivo en todo esto, salí de estas tiendas como entré, es decir con mis tarjetas de crédito y de débito saniiiiiiitassssssss. Por lo menos eso es un consuelo. ¿O será que llegué muy tarde a la rebajas y se rebajaron de un solo plumazo las tallas? Tal vez, pero las mías siguen igual.
Pero bueno, dejando a un lado el cálculo económico sobre los precios de estas prendas de vestir, que se deben estar comprando a un dólar no precisamente rojo rojito (de Cadivi o cambio oficial), tengo que decir que no encontré la talla L en estas tiendas.
¿Alguien me puede explicar por qué co… en el país de las mises se acaban tan rápido las tallas L o grandes, o es que no existen? Ya sé que a las gorditas y a los gorditos nos sacan prácticamente del mercado de la moda, pero pensé que por lo menos podría encontrar una que otra blusa acorde con mis medidas.
En fin que esto es un trauma. Ya se ha escrito mucho de la discriminación por las tallas. ¿Que más podemos decir entonces? Bueno que hay algo positivo en todo esto, salí de estas tiendas como entré, es decir con mis tarjetas de crédito y de débito saniiiiiiitassssssss. Por lo menos eso es un consuelo. ¿O será que llegué muy tarde a la rebajas y se rebajaron de un solo plumazo las tallas? Tal vez, pero las mías siguen igual.
10 comentarios:
Esta es una blog-invitación a mi ciber-happening.
Te espero este sábado 27 en mi ascensor o asómate antes de quedar atrapado.
ay Katy, definitivamente esto no tiene otra palabra que "disriminación"... como dije yo en alguna oportunidad, estamos en presencia del suiguiente fenómeno "en Venezuela no se hace ropa para las mujeres, se hacen las mujeres para la ropa"
Quiza no sea mucho, pero si te sirve de consuelo, te mando Un besote acorde "a tus medidas".
Yo desde hace rato me resigné a que la ropa de firma no se adapta a mi figura. Entendí que no tengo nada que buscar en Zara, Bershka, Diesel, Levis, y para usted de contar. En esas tiendas la talla L, es para chicas que no pasan de 60 kg. Pero gracias a Dios existe el mercado de El Cementerio (el más y mejor surtido de Latinoamérica), y las maravillosas tiendas de los árabes en la Isla de Margarita. Allí se pueden conseguir maravillas y a precios solidarios. Y el mejor resultado es que las tarjetas de débito y de crédito se golpean pero siguen sanas.
Yngrid
que bueno que alguien se de cuenta de la cara de mongòlicos que nos han visto a todos con eso de las rebajas... es una hipocrecìa, un saludo a las tarjetas de crèdito eso de "el sale venezolano". lo peor es la cantidad bestial de gente que como becerros van a comprar de forma compulsiva en esta temporada, cuando ya los estantes estàn a medio vaciar y haces colas kilomètricas para pagar ropa que apenas te han rebajado un pelo, pero que en este país de consumismo ciego parece una gloria... tranquila kati es un eufemismo eso de "rebajas de enero", en cualquier otro momento te compraras algo que se te vea bello, y deja el trauma con tus kilos, a la final estàs "divinamente rellena", no?
que bueno que alguien se de cuenta de lo hipòcrita que son esas "rebajas de enero" en muchas tiendas de caracas. anuncian con bombos y platillos la tan ansiada època de "sale", pero cuando vas a ver se trata de un insulto a tu inteligencia... bueno a la de los que la tienen, porque si te pones a ver la cantidad de gente que cual becerros compran por docenas en esta temporada aun cuando lo que las rebajas traen es un descuento irrisorio a los precios normales, te quedas boquiabierto pensando què le pasa a toda esa gente!!! es tan simple que este es un paìs donde el consumismo no encuentra receso y esas supuestas rebajas suenan a gloria... colas kilomètricas para pagar unos miles por debajo del precio, casi les agradecen a las tiendas por llevar al lìmite las tarjetas de crèdito, asì que no te pierdes de nada, mi querida Kati, ya compraràs en cualquier otra ocasiòn algo quete quede bello sin formar parte de la manada ciega y boba que hace en fila por comprarse algo en zara o bershka... y no te preocupes por la talla, total estàs "divinamente rellena", no?
No entiendo porque no se dan cuentan y aceptan que la mujer latina es curvilinea! Que tiene de malo serlo, siempre que no afecte la salud?
No se porque la moda en Venezuela es tan idealista! Pensar que todas son talla S y las muy gorditas son talla M, JA! Las latinas somos curvilineas...Don de Dios! Ya quisieran las europeas, y las norteamericanas, tener estas caderas y este busto por el cual tantas pagan mucho dinero.
Definitivamente encontraré algo que vaya acorde con mi figura Divinamente rellena. Saludos a todos y gracias por sus comentarios. No nos dejemos engañar por las rebajas que lo único que buscan es que actuemos como unos consumistas descontrolados.
Hola!
Acabo de conocer tu blog, felicidades me encanta. Precisamente en mi último post (20 enero) También comento sobre las rebajas y la relación de estas con el marketing que nos incita a comprar. Te invito a leerlo. Saludos!
16gramos.blogspot.com
Paradójicamente en Holanda, el país de las mujeres consideradas MOLLEJUAS se acaban rápido las tallas S y M...
Supongo que es un buen indicio si en el país de las misses abundan Tallas L
;)
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