sábado, 31 de marzo de 2007

Autoboicot al amor


En una de esas conversaciones que inevitablemente surgen en una redacción llena de mujeres. Una chica dice: ¿pero bueno si él dijo que eras linda así gordita y natural por qué te boicoteas tu misma?

Y cuántas veces no nos boicoteamos pensando que por ser divinamente rellenas un chico guapo no se fijará en nosotras. Pero es una realidad, cuando nuestros sueños se cumplen, pensamos que es una pesadilla tener todo lo que queremos. Le buscamos las 5 patas al gato y no nos creemos que las cosas puedan salir bien en el amor aunque sea por una vez.

Ya es tiempo de dejar los fantasmas que nos rodean y comenzar a pensar en positivo. Nos encanta sufrir, y cuando todo esta en calma, estamos esperando que pase algo para decir: lo vez yo sabía, es que era demasiado bueno para creerlo.

Las cosas buenas si suceden. Aunque los finales felices no siempre ocurren como dice Julieta Venega, hay pequeñas cosas que te pueden suceder que son comienzos para un mejor camino en el amor. Así que a tomar aire puro y pensar con optimismo.
No al autoboicot.

sábado, 24 de marzo de 2007

¿Qué queremos las mujeres?, según Maitena

Porque no hay nada mejor que autocriticarnos para tratar de superar nuestras propias debilidades y errores.

Aquí mi mejor manera de hacerlo a través de las caricaturas de Maitena.


¿Complicada Yo?

Una amiga me escribió un comentario: "Las mujeres somos las complicadas, los hombres no", más o menos así decía.

Yo creo que las mujeres nos hacemos las complicadas, pero en realidad somos muy sencilllas, todo lo que queremos es que nos abracen, nos mimen y nos hagan sentir las únicas del universo, y ese es precisamente el problema no somos las únicas en el universo y la competencia es ferrea. Entonces cuando un hombre percibe lo complicada o intensa que puede ser una chica, sale corriendo inmediatamente. Para qué complicarse con una así habiendo otras que saben disimular muy bien su intensidad.

Bueno para aclarar, entiendo y personalmente lo acepto que nos pasamos de intensas, frecuentemente nos ahogamos en un vaso de agua por las cosas, y nos hace falta un poco mirar a nuestro alrededor para entender que no vale la pena complicarse tanto, que la vida hay que disfrutarla con lo mucho o lo poco que se tenga.

Nos hace falta dejarnos llevar un momento por las buenas cosas, sin complicación, sin tanta pensadera (porque mira que pensamos en las mil y una cosas a la vez. Dios nuestra mente femenina nunca descansa). Creo que necesitamos relajarnos un poquito.

Hace unos días un chico me dijo: "Debes ser terrible con el control remoto". Me quedé un poco sorprendida por el comentario, dado que no estaba en un lugar con un televisor, sino en un carro del periodico. Pero es que yo me pasé todo el camino cambiando de una emisora radial a otra hasta encontrar una canción que me gustara. Claro que a su vez, estaba angustiada por llegar a tiempo a una rueda de prensa y todo el mundo me llamaba por teléfono.

Se imaginarán la escena, es que yo puedo poner nervioso a cualquiera, no por mi exhuverante figura, sino por lo inquieta y estresante que puedo ser (no piensen mal aunque se les agradece que lo hagan jejeje). Finalmente llegué a tiempo a la rueda de prensa y dejé el estres. Pero siempre ando en un corre corre.

viernes, 23 de marzo de 2007

La infidelidad vista por un hombre


Para pasar el tiempo entre las colas de Caracas, mientras iba al trabajo, el tema de la pareja salió a relucir en la conversación.

Y un chico decía afanoso que ya no se acostumbraba a vivir solo. Una relación de pareja informal es decir sin papeles de matrimonio de por medio, marcó su vida de tal manera que anda desesperado por encontrar a alguien de nuevo.

¿Pero qué sucedió? ¿Por qué un hombre que añora tanto la vida en pareja esta solo? ¿Quién falló?

Entonces me contó:

"Vivíamos chevere, teníamos un compromiso pero sin papeles de por medio. Un fin de semana largo ella se fue de viaje a Nueva York a traer mercancía (ropa) para surtir la venta que tenía en el mercado del Cementerio. Unos amigos que hace tiempo no veía me invitaron a salir y a beber, la pasamos bien, y entonces me levanté una chama que estaba bien buena y que más terminados los dos pasando una noche ardiente en un motel".

Aquí se detiene la historia y yo digo: Ah bueno pero entonces fue por cachos la cosa.

El dice: Si pero bueno fue un cacho pequeño y una sola vez más nunca lo iba a hacer.

Sigue narrando el chico: "Lo que paso es que esa mañana cuando salíamos del motel "La Orquídea", con tan mala suerte que mi cuñada y su esposo salían también de una de las habitaciones y bueno me cacharon con el cacho".

--Mier...-, dije yo.

Continuó el chico:..."antes de meterme en más problemas cuando llegó mi mujer le conté lo que había pasado pero se echó a reír y ni siquiera me creyó. Claro que al pasar los días se encontró con su hermana y por su puesto a ella si le creyó. Tuvimos una discusión muy fuerte y me dejó, tanto así que ahora vive en España".

Chamo que lío, es que no se las mujeres creo que no perdonamos infidelidades. Ustedes perdonan infidelidades.

Me dijo: "No pero eso no fue infidelidad fue sólo sexo".

Le dije: Si yo siempre escucho eso, que para ustedes los hombres las cosas se resuelven en la palabra SEXO, que ir a un burdel o levantarse una jeva pero teniendo pareja, no es más que una distracción, como ir al cine a ver una película es una diversión, es sólo SEXO, entonces.

Me dijo: Si claro es eso, ella no tenía por qué dejarme.

Le dije: Qué pasaría si ella te hubiese puesto los cachos a ti. Tu que hubieses hecho.

Me dijo: Mier... chama eso es demasiado fuerte porque ustedes las mujeres se mezclan sentimentalmente y si ponen cachos ya uno esta jodido.

Me comenzó a contar otra historia: "Eso está como una chica que me tenía loco en bachillerato, nunca tuvimos nada en esa época, pero luego la vi hace unos años, ella es toda una profesional. Me llamo y quedamos para vernos. Sucedió lo que siempre quise, pero luego de enterarme que estaba casada no comprendí como le puso los cachos a su marido. Se me cayó del pedestal que en que la tenía, ella era para mi especial, pero luego no entendí por qué le fue infiel a su marido y diciéndome que estaba enamorada de él".

MI REFLEXIÓN

Este chico no es más que el típico hombre venezolano o latino o del mundo entero, porque seguro son iguales en todas partes ¡HOMBRE NO ES GENTE! que se lanza a la infidelidad como quien se come un dulce y está a dieta, luego llega el lunes y comienza el régimen de nuevo. Pero si la mujer hace lo mismo no la perdonan. Es más la juzgan y de una vez la dejan.

Nunca he entendido el entramado cerebro del hombre. La palabra básico la utilizamos con mucha frecuencia las mujeres para describir a los hombres. Pero yo no creo que sean básicos creo que tienen sus complicaciones. Aún no logro entenderlos. Sufren igual o peor que nosotras, pero para rehabilitarse de un amor comienzan a ser unos disparates que no comprendo. Otro día escribiré todas mis dudas sobre los hombres a ver si quizás alguien las descifre.

jueves, 22 de marzo de 2007

Un año más


Que decir de mi cumpleaños, la verdad no lo sé, me tomé el día libre, no hice más que estar tranquila y sin presiones.


Un brindis con amigos en una noche estrellada y el pensamiento de que la vida esta corriendo ante mis ojos. Todo tiene su tiempo.


Algunas mujeres comienzan a ocultar la edad luego de pasar la barrera de los 30. Personalmente estoy orgullosa de tener 33 años, acabo de firmar la compra de un apartamento que gracias a Dios, a mi madre y al apoyo de mis amigos logré obtener con mucho sacrificio, tengo un empleo, una carrera y la oportunidad de respirar y ver un día más.


A los 30 la vida de ve de otra manera, es dificil aceptar algunas cosas, pero en cambio se comienza a ver todo distinto. Creo que me siento más libre que ayer, más tranquila y menos estresada. Y sobretodo trato de que no me afecte la presión que ejerce esta sociedad sobre las mujeres solteras y profesionales. Un año más para ésta divinamente rellena que se quiere seguir comiendo al mundo. Salud.

domingo, 11 de marzo de 2007

Esas manías que me identifican y desesperan a otros

-En un restaurante o en el trabajo a la hora de la merienda: En lugar de café con leche como todos, pido leche fría para poder comerme esa torta exquisita de chocolate o la galletica chips Ahoy.

-En el cine: El combo tradicional de cotufas y refresco que piden todos, mientras yo prefiero el nesti y de Nestlé sino, no lo tomo. Llegar antes de que comiencen los trailes de las películas si llego cuando ya han comenzado siento que me perdí la mitad de la película e inmediatamente me pongo de cierto mal humor que casi no se nota porque se diluye con el film que vine a ver. Y por su puesto salir al baño en la mitad de la peli y en el momento más emocionante, lo hago siempre pero últimamente trato de aguantar jejeje. Cuando surge una escena impactante, automaticamente tengo el impulso de sujetarme a la persona que esta al lado, más de una vez he pasado pena con la gente desconocida y en otros casos con amigos que se asustan cuando de la nada sale mi mano sujetando uno de sus brazos (no piensen mal).

-En el trabajo: La mayoría impecable de pie a cabeza y yo me voy desordenando el cabello a medida que pasa el tiempo y llega el momento de terminar de escribir la noticia que estoy redactando. Al final del día tengo una mezcla del peinado de Lina Ron cuando comenzó el proceso revolucionario y la versión de Gloria Trevi recién levantada. ¡Como se molestan mis compañeras glamurosas! jajajaja. Es divertido verles la cara.

-En un taxi: El conductor asume las rutas con todo y trafico mientras el pasajero comienza a pensar en otros asuntos. Pero en mi caso, le doy inmediatamente el croquis mental al conductor, por dónde se debe o no se debe meter, doblar aquí, allá y si no hace caso, es motivo de amargura con insulto incluido de mi parte.

-En un cafetín de Quinta Crespo: Lo típico una empanada con un jugo, lo que pido yo, un jugo de mora, un cambur y un pedazo de queso me recuerda mis desayunos en el Táchira. Esa combinación me derrite.

-En la heladería: Sólo los helados con sabores cítricos, porque me empalagan los extremadamente dulces. Ah y otro postre es el brownie con helado de Friday's si no no sirve.

Las mujeres estamos llenas de manías y a medida que pasan los años la cosa se pone mejor jejejeje.

sábado, 10 de marzo de 2007

Espíritu impaciente

-¿Qué te pasa hija?
-Estoy aburrida mami

Esta frase la he dicho una y otra vez desde que tengo uso de razón, no sé como aprendí acerca del aburrimiento, pero es la palabra que utilizo desde chica para describir que si no hago algo inmediatamente, la vida se puede acabar.

-Ponte a ver televisión, leer y escuchar música.

-No, no es eso, tengo que hacer algo, cuando pueda me voy otra vez de viaje.

Cuando mi madre comienza a preocuparse le recuerdo: es como cuando decía "no tengo nada que ponerme, estoy aburrida" y en realidad había ropa en el closet y cosas que hacer.

Es sólo la expresión de mi espiritu libre e inquieto que no deja de trabajar ni de día ni de noche. Si fuera un animal sería un caballo salvaje o un aguila que recorre sin rumbo fijo el firmamento.

Admiro a las personas que se sientan y disfrutan contemplar las cosas pequeñas de la vida con calma. Se toman su tiempo, no andan apuradas, saben que podrán hacer las cosas en su debido momento.

Pero yo tengo esa sensación de velocidad que me atrapa y me lleva de un lugar a otro. Por lo general las mujeres somos inquietas, impacientes, queremos todo y para YA. No sabemos esperar y cuando nos adelantamos a las cosas nos golpeamos fuertemente, pero seguimos. (ALGUNAS SI SABRÁN ESPERAR Y SEGURO LES IRÁ MEJOR)

"No podemos dormir hasta que no terminemos este trabajo", recuerdo que le decía a mis compañeras en la universidad. Pronto me vencía el sueño y por su puesto ellas ya habían caído en los brazos de morfeo. Pero yo me resistía a sucumbir.

¡Qué dificil es esperar pacientemente! A veces no queda otra opción.